Dicen que en el pueblo no deja de llover. Que los rayos desgajan los cielos cenicientos. Que han vuelto a sacar la ropa de otoño, ese eterno antaño, y que han abierto los paraguas como una floración a destiempo. Uno, desde tan lejos, se imaginaba ya, sin embargo, esas primeras y largas tardes azules de junio, la gente bajando al…
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Con el azadón al hombro
Se despertó todavía de noche. Encendió la radio. «En España hay veinte mil enchufes de recarga para coches eléctricos…». Cambió de emisora y dio con un punteo de guitarra. La música le hacía hundirse plácidamente en la cama; pero la apagó y se incorporó. A lo lejos se oían ranas y grillos zapateros. De debajo de la cama sacó el orinal…